Durante el mes de septiembre, el proyecto de modernización a la legislación tributaria en Chile deberá iniciar su segundo trámite en el Senado. Y de la mano del proyecto, también la futura transformación para las empresas de todos los tamaños que aún no hayan incorporado a su gestión la boleta electrónica.
Como te hemos explicado en post anteriores, los alcances de esta normativa contemplan la eliminación del comercio las conocidas boletas de papel.
Cabe destacar que las transacciones que se verán afectas serán aquellas que efectivamente en la actualidad tienen la obligación de emitir una boleta en papel. La boleta electrónica viene a ser solo un reemplazo, pero no incorpora nuevos hechos gravados.
Pero, ¿por qué es relevante la implementación de la boleta electrónica y cuáles serán los beneficios de su implantación? Aquí algunas cifras que te ayudarán a entender la relevancia de subirte al carro de la transformación digital en los comprobantes de pago de tu empresa.
La boleta electrónica disminuirá la evasión fiscal
De acuerdo a las estimaciones de la autoridad económica de gobierno expuestas en el informe financiero fiscal, una vez que la ley entre en vigencia, la recaudación del año por boleta electrónica será de US$265 millones. Mientras que, en 2023, cuando se encuentren todos los contribuyentes obligados a emitir boletas electrónicas, aumentaría a US$ 1175 millones.
Esta medida, por lo tanto, permitirá rebajar de forma considerable la evasión tributaria de las empresas, aumentando el ingreso de recursos a las arcas fiscales. Se estima además que las pequeñas y medianas empresas declararían ventas por hasta 12% extra.
De acuerdo a cifras presentadas por el diario La Segunda, respecto de la evasión, se presupuesta que puede ir desde 0.25 puntos en su línea más baja hasta 1,5 puntos para el año 2023. En el mismo periódico, el académico de la Escuela de Economía y Negocios de la Universidad Central, Robinson Fuenzalida, indica que “la disminución de evasión con la incorporación de la factura electrónica fue de casi 3 puntos desde 2014 hasta el año de consolidación, en 2018, específicamente en enero de ese año. La evasión del IVA disminuyó desde 2014 hasta la fecha, desde 23% a 20%”.
Sin duda, este cambio busca impactar positivamente a las empresas, ya que a la vez podrán llevar un registro más eficiente de los ingresos y gastos que se realicen a través de boletas. Esta digitalización beneficiará a diversos procesos dentro de las empresas. Entre ellos, la rendición de gastos, donde la incorporación de la boleta electrónica con código se podrá escanear fácilmente para obtener la información con un solo clic, a través de plataformas como Rindegastos
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