Sin importar tamaño o rubro, las empresas han potenciado la digitalización de sus procesos, herramientas y logísticas para mantener su productividad frente a la crisis sanitaria desatada por el covid-19.
Esta es una de las preguntas que hoy se comparte a través de redes sociales y otras plataformas de internet. La alternativa más elegida por los usuarios no ha sido ni “los equipos” ni “la dirección de la empresa”, sino que “el coronavirus”.
Es que, como una de las grandes consecuencias que ha traído la crisis sanitaria desatada por el covid-19, las empresas y mercados alrededor de todo el mundo han debido digitalizar la forma en que producen y comercializan sus productos o servicios. Así han logrado dar respuesta a los nuevos patrones de comportamiento dados por las cuarentenas preventivas y el distanciamiento social.
Como ya te hemos comentado en publicaciones anteriores, la transformación digital no se trata únicamente de introducir nuevas tecnologías, sino que es por sobre todo un cambio cultural al interior de las empresas.
Por eso, aquí Rindegastos te cuenta sobre algunos procesos de digitalización que se han vivido en tiempos del coronavirus y sobre algunas claves para que puedas llevarla con éxito al interior de tu empresa.
Hoy, producto del coronavirus, se estima que en Chile tres de cada cuatro trabajadores se encuentra realizando labores a distancia. Esto ha significado que empresas de todos los tamaños han debido introducir a su gestión nuevas herramientas digitales para hacer el seguimiento de sus tareas, organizar reuniones y compartir archivos de trabajo. Y esto ha ido de la mano de nuevos aprendizajes por parte de los trabajadores respecto a cómo usarlas correctamente.
No solo los puestos de trabajo más formales y las tareas se han digitalizado. Los procesos de capacitación, aprendizaje y enseñanza también lo han hecho. Las clases en línea se han transformado en el nuevo desafío para instituciones educacionales y para los estudiantes de todas las edades, pero también para las empresas que deben transferir conocimientos a sus trabajadores.
La forma de llegar a los clientes con los productos y servicios también se está transformando. Por la restricción en la apertura de tiendas físicas y de las personas para salir a comprar, muchas empresas han visto en el comercio electrónico la alternativa ideal para continuar ofreciendo sus productos y servicios a los clientes. Y lo mismo ha sucedido con la apertura hacia canales de atención digitales para los usuarios de diversos servicios.
Las cadenas de producción, logística y distribución también han tenido que abrirse a la digitalización, una de las causas ha sido la disminución de recursos humanos debido a las restricciones de movilidad.
Toda crisis es también una oportunidad para innovar. Así, se ha visto la apertura de mercados ‘open source’, donde los conocimientos son compartidos e invitan a descargar, imprimir y construir online, desde muebles hasta implementos de salud. Esto también ha sido una oportunidad para nuevos mercados como el de la impresión 3D.